El compromiso del matrimonio para mi, siempre será el más sagrado de todos. Es aquel en el cual nos comprometemos a cuidar uno del otro incondicionalmente. En la riqueza y la pobreza, en la felicidad y en los peores momentos.
Es cuando decides cuidar de alguien más y no por obligación sino porque así lo deseas, porque verlo sonreír es más valioso que el dinero. Y sus abrazos son más cálidos que el mismo sol, y aun en los momentos más difíciles, el sostener su mano te hace sentir respaldado. Y que sin importar lo que pase, el amor persistirá y se continuará cultivando, una y otra vez por la eternidad.
Aún cuando uno se equivoque y caiga, su compañero siempre estará para tomarle la mano. A mí me enseñaron que el matrimonio se cuida, se protege y se lucha por siempre tener una mejora constante. No sé desecha al primer problema que se tenga. Sino que resiste, se pelea contra viento y marea para sostener su barco aflote. Y siempre busca lo mejor del otro. Porque de eso va el unir tu vida, para siempre compartirla. No hay egoísmo, rencores o ira. Y nunca se van a dormir si están molestos, porque al final del día las trivialidades no son más que eso, y no vale la pena hacer crecer sentimientos negativos en donde no debe haberlo.
Para mí, eso es el compromiso del matrimonio. Es un contrato que decidimos firmar y acatar por gusto propio. En donde dejaremos de ser dos personas, para convertirnos en una misma, ante los ojos de Dios y de todos quienes nos rodean.
Licenciado en Ciencias de la Comunicación. Comenzó como Community Manager en el 2011 con Blogger y termino con WordPress. Escribe sobre amor, temas LGTB+, y quizás mañana sobre Política.
Es Comunicólogo por Profesión, pero Psicólogo por vocación.
Descubre más desde Jaasiel Dice | Blog de Noticias LGBT+
Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.
1 comentario
Antes creía que el matrimonio no era algo que debía pasar, pero a medida que he crecido, mis ganas de casarme lo han hecho también. Me gusta la manera como lo describes y la comparto.