Te escribo esta carta para decirte todo lo que no pude entender en su debido tiempo. Debo admitir que no entendía en su plenitud el problema del que me decías, quizás mi error fue nunca entender las cosas desde tu lado, de hecho ahora que lo pienso, si estaba bien pinche loco.
Sé que en este momento nos encontramos en diferentes rumbos, con metas completamente distintas, puede que quizás parezca un poco patético hacer esta carta pero tu sabes que así funciono yo, al no dejar ni un cabo suelto.
Debo admitir que aprendí mucho de ti (te lo agradezco) y espero que tú también aprendieras algo de mí. Te diría que te extraño pero sería una mentira, lo que si quisiera hacer es darte ese abrazo final que nosotros mismos nos negamos, en ese preciso momento que ambos sabíamos que ya no había más, cuando nos vimos por ultima vez y ninguno intento hacer algo para detenernos.
Espero guardes lo que te di, porque yo también lo hago y no por no olvidarte, simplemente porque me gusta guardar mis buenas memorias. No eres un error y nunca lo seras, fuiste una de mis lecciones de vida que siempre conservare.
No me odies por no hablarte ese día que nos encontramos, pero yo no me sentía listo para mirarte a los ojos sin llorar, aunque tampoco me detuviste o insististe. Quizás entendí que no habíamos desarrollado aún la reciprocidad.
Cuídate mucho y sigue adelante con tus planes, que en un futuro no muy lejano habremos de encontrarnos. Recuerda que siempre debemos apostar por lo que queremos aún cuando no veamos ninguna luz, porque solo nosotros podemos encender esa vela en la densidad de la obscuridad.
Te quiere, Jaasiel.
Licenciado en Ciencias de la Comunicación. Comenzó como Community Manager en el 2011 con Blogger y termino con WordPress. Escribe sobre amor, temas LGTB+, y quizás mañana sobre Política.
Es Comunicólogo por Profesión, pero Psicólogo por vocación.
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