Es quererse por lo que eres, tanto por las cosas buenas como las malas. Saber sacar todas tus virtudes y aprender de tus errores, es poder ver tus fallas para levantarte y ser mucho mejor para comprender que no importa cuantas veces caigas, sino como afrontes tus problemas.
Es levantarse por las mañanas y al verse al espejo estar feliz con lo que ves. No querer cambiarte o modificar como eres porque exactamente esas diferencias son las que te hacen único. No busques ser alguien que no eres solo porque los demás tengan un concepto erróneo de la belleza.
Buscar el siempre aprender cosas nuevas y hacer de ti una persona analítica, inteligente y educada, porque muchas veces vale más eso que tener dinero. Aprender que “el siempre estudiar” es para beneficio tuyo y no de los demás.
Saber que no importa si eres alto, bajo, flaco, gordo, con barba, sin barba, que uses lentes o no, moreno, güero, lampiño o pelirrojo. Eres así por una razón y nunca pienses que la naturaleza se equivocó contigo.
Aprender a reírse de uno mismo y comprender que no es necesario cosas caras o nuevas para ser feliz, sino el tener salud, familia, hogar, comida y una cama donde dormir.
Y entender que antes de poder amar a alguien, debes aprender a amarte a ti mismo.
¿Tú te amas a ti mismo?
Licenciado en Ciencias de la Comunicación. Comenzó como Community Manager en el 2011 con Blogger y termino con WordPress. Escribe sobre amor, temas LGTB+, y quizás mañana sobre Política.
Es Comunicólogo por Profesión, pero Psicólogo por vocación.
